top of page
IMG_6371.JPG

EL SOBREPESO Y SENTARTE EN MALA POSTURA TAMBIÉN DEBILITAN EL SUELO PÉLVICO, MÁS ALLÁ DE LA EDAD


Con los años, la musculatura pélvica se debilita. En especial en las mujeres debido a los embarazos. Pero hay factores que pueden perjudicar especialmente esta zona.


Un suelo pélvico debilitado favorece las pérdidas de orina, los prolapsos: caída del útero, la vejiga o el recto o las disfunciones sexuales.


Suelo pélvico es el término que se utiliza para denominar al grupo de músculos y ligamentos que rodean la cavidad abdominal y que se encargan de sostener la vejiga, la uretra, el útero, la vagina y el recto en su lugar adecuado.


Por qué se debilita el suelo pélvico

1. Sobrepeso y obesidad

Un peso excesivo, y en particular un exceso de grasa en la zona central del cuerpo, aumenta la presión que tienen que soportar las vísceras abdominales y, por tanto, también la vejiga, lo que debilita la musculatura pélvica.


2. Caminar o sentarse con mala postura

Laura Roja, fisioterapeuta experta en suelo pélvico asegura que es muy importante caminar y sentarse bien, ya que las malas posturas también castigan la musculatura pélvica.


Al caminar hay que mantener la pelvis neutra, ni sacando culo ni llevando el pubis hacia delante, sino alineada con las curvas naturales de la columna.


3. Deportes de impacto

El ejercicio es muy saludable para la musculatura corporal, incluida la pélvica, pero los deportes de impacto pueden acabar debilitando esta zona, por lo que no convienen si ya está debilitada.


El running, el crossfit, el pádel, el tenis o el ciclismo son deportes de impacto que no se aconsejan si hay pérdidas de orina. Para fortalecer la musculatura pélvica son adecuados el pilates, el yoga, la natación y, más concretamente, los ejercicios de Kegel que trabajan los músculos pélvicos.


4. Falta de testosterona

En las mujeres no abunda (es la hormona masculina por excelencia), pero la Asociación Americana de Urología advierte que no conviene tener niveles muy bajos.


Si el cuerpo no dispone de ella aparece cansancio, ganancia de peso, ánimo bajo, pérdida de cabello y debilidad de todos los músculos, también los pélvicos.


6. El sedentarismo

Hacer ejercicio de forma regular y moderada no perjudica el suelo pélvico”, añade González. Solo hay que tener en cuenta que, al igual que se fortalecen otros músculos del cuerpo, también se deberá fortalecer esta zona mediante ejercicios específicos, como los de Kegel.

20 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page